Tips para utilizar menos plástico en casa
La contaminación generada por el consumo de plásticos constituye uno de los mayores problemas medioambientales a los que nos enfrentamos en la actualidad. La industria del plástico supone la primera causa de generación de residuos no orgánicos a nivel planetario y el 91 % de los plásticos que producidos no llegan nunca a reciclarse. Una contaminación especialmente peligrosa tanto para los entornos naturales, como para la biodiversidad del planeta y para la salud de las personas.
En este sentido, la regla de las 3 erres ecología nos dice que para lograr un mundo más sostenible debemos recurrir a la reducción de la generación de productos de consumo y de residuos, a la reutilización de los objetos que producimos y al reciclaje de los materiales una vez que los objetos no pueden ser reutilizados. De estas tres erres, la de la reducción es la más importante y efectiva de las tres, ya que ataja el problema de la contaminación y de la generación de residuos en la fase más cercana de la cadena de producción. Y por eso, desde nuestro compromiso con la sostenibilidad y con el medio ambiente, hoy en Freshis queremos ofrecerte 9 consejos que puedes seguir para reducir el consumo de plástico en casa y contribuir así a cuidar el planeta.
9 tips para reducir tu consumo de plástico en casa
1. Utiliza bolsas reutilizables de tela para hacer tus compras
Uno de los mayores problemas de la contaminación por plásticos tiene su origen en la utilización de plásticos de un solo uso. Se trata de un uso del plástico especialmente insostenible, ya que este tipo de materiales se convierten automáticamente en desechos tras cumplir su función. Los plásticos de un solo uso se emplean mayoritariamente en la fabricación de envases y envoltorios de todo tipo de productos y bienes de consumo. Pero también en las bolsas que utilizamos para realizar nuestras compras, unas bolsas que pueden llegar a tardar hasta 400 años en degradarse en el medio ambiente. Así, una de las formas más fáciles que tienes para reducir tu consumo de plásticos es la de emplear bolsas reutilizables cuando vayas a comprar. Y si están hechas de materiales sostenibles —por ejemplo, de telas de fabricación orgánica— y reciclables, mejor que mejor.
2. Usa envases retornables
Este tipo de formato es ideal tanto desde el punto de vista de la reutilización de los materiales y de la sostenibilidad, como de la comodidad en el consumo, ya que normalmente las empresas distribuidoras facilitan la recuperación y el reacondicionamiento de los envases retornables para volver a ponerlos en circulación. Por ejemplo, en Freshis empleamos cajas de madera, tuppers y botellas de cristal retornables para llevarte tu compra de frutas y verduras frescas a casa. Así, cuando realizas un nuevo pedido podemos recoger estos envases de vuelta de la manera más cómoda para ti. Si pasa un tiempo hasta que realices tu siguiente pedido, también puedes concertar una recogida de nuestras cajas y otros envases retornables para que puedan volver a ser utilizadas.
3. Pásate al vidrio
El vidrio es un material muchísimo más sostenible que el plástico. No solo puede ser reutilizado, siendo una opción perfecta más de envase retornable, sino que cuando los envases de vidrio ya no pueden ser reutilizados, bien porque presentan desperfectos o bien porque están desgastados, estos pueden ser reciclados tantas veces como queramos, siendo el vidrio el único material 100 % reciclable.
Además de optar por los envases de vidrio a la hora de hacer nuestras compras, también podemos utilizar este tipo de envases en el hogar para reducir el consumo de plásticos. Por ejemplo, podemos usar botellas de vidrio para almacenar y servir el agua en casa o podemos usar fiambreras y tuppers de vidrio en lugar de aquellos hechos de plástico.
4. Compra a granel
Hoy en día, en la mayoría de las ciudades es posible realizar la compra de muchos de los productos básicos que necesitas para el día a día a granel. Bien empleando tus propios recipientes reutilizables o usando bolsas de papel y de otros materiales biodegradables y reciclables. Las legumbres, la pasta, los frutos secos, los dulces e incluso productos de higiene como jabones y champús pueden llegar a tu casa sin necesidad de involucrar plásticos en el proceso. En el caso de los productos frescos, las legumbres, las frutas y las verduras, ya sabes que puedes contar con Freshis para tenerlos en tu mesa. Te los llevamos directamente del agricultor en menos de una hora. Y usaremos nuestras cajas retornables o bolsas y sobres de papel kraft. Un material fácilmente reciclable y biodegradable.
5. Las botellas de agua, mejor libres de plástico
El plástico que se emplea para la fabricación de las botellas de agua también es uno de los más fáciles de los que puedes prescindir. Para ello, basta con emplear el agua del grifo siempre que te sea posible. Un agua que en España tenemos la suerte de que sea de una calidad excepcional para el consumo humano en la mayor parte de los puntos de nuestra geografía. Si en tu ciudad el agua del grifo tiene algo de sabor, puedes conseguir neutralizarlo utilizando filtros especiales para el grifo o jarras autofiltrantes. Las que utilizan un filtro de carbono suelen dar los mejores resultados en lo que a conseguir un sabor neutro se refiere. En cuanto a las botellas para contener el agua en sí, puedes recurrir a botellas y jarras de vidrio, de acero inoxidable y de otros tipos de materiales que resultan más sostenibles para el planeta. Ten en cuenta que las botellas de agua de plástico no sólo generan contaminación y residuos no biodegradables, sino que para producir cada botella se necesita utilizar hasta el triple de agua de la capacidad que contienen.
6. Ojo a tus productos de cosmética e higiene personal
Aunque parezca mentira, el plástico llega a estar incorporado como ingrediente en un montón de productos destinados al cuidado personal o a un uso cosmético. Muchos de estos productos contienen pequeñas partículas de microplásticos que funcionan como agentes microabrasivos. Sobre todo los encontrarás en cremas exfoliantes para la piel y en pastas dentífricas. Para evitarlos, revisa cuidadosamente la lista de ingredientes de estos productos de consumo. Esto también es aplicable a productos de higiene íntima como compresas, tampones, pañales, toallitas, etc.
7. Revisa la composición de tus prendas de ropa
Uno de los grandes problemas de la contaminación por plásticos es la inmensa dependencia que gran parte de las industrias y actividades humanas tienen de este material tan insostenible. Una dependencia que no siempre salta a la vista. Por ejemplo, si revisas las etiquetas de tus prendas de vestir, verás que muchas de ellas están fabricadas a partir de plásticos y otros materiales derivados del petróleo. Y es que la industria de la moda es una de las más contaminantes del planeta. Así, si quieres reducir tu consumo de plástico en casa, asegúrate de que las próximas prendas que compras están libres de materiales sintéticos como el nylon, el poliéster, el elastano, la lycra o el PET. Mejor opta por ropa elaborada con fibras naturales como la lana, el cáñamo, el lino o el algodón.
8. Cocina en casa siempre que puedas
Cocinar en casa tu propia comida hará que consumas mucha menor cantidad de alimentos procesados y de comidas preparadas. Así, no solo disfrutarás de una dieta mucho más saludable y equilibrada, sino que podrás reducir el excesivo uso de plásticos que se emplea en la fabricación de los envoltorios y envases de las comidas ultraprocesadas. Las bandejas y recipientes para este tipo de alimentos fabricados a partir de poliestireno expandido, por ejemplo, tardan más de 500 años en degradarse de forma natural cuando se desechan en el medio ambiente.
9. El café, el té y las infusiones... sin plástico, gracias
Si te gusta disfrutar del pequeño placer de poder tomarte un café para llevar en cualquier momento y en cualquier parte, puedes reducir tu consumo de plástico prescindiendo de los vasos desechables para llevar. Un tipo de recipientes que, aunque muchas veces emplean papel como material principal, a menudo incorporan recubrimientos de plástico que complican los procesos de reciclaje. La mejor alternativa es llevar siempre contigo tu propia taza reutilizable. Si prefieres el té y otras infusiones, recuerda que la mayor parte de las bolsitas de té que se comercializan incorporan algún tipo de ingrediente plástico en su composición. En este caso, la solución más fácil es recurrir a un infusionador que podrás reutilizar miles de veces.
Esperamos que con estos sencillos trucos sobre cómo reducir el uso del plástico en casa te sean de fácil aplicación. Practicando estos sencillos hábitos de vida sostenible, lograrás reducir tu impacto ambiental de forma considerable.